Aprender dos idiomas a la vez es posible con la estrategia y la planificación adecuadas. Descubre cómo progresar en ambos idiomas simultáneamente.
Elige dos lenguas distintas
Aunque resulte tentador animarse con el neerlandés a la vez que aprendes el alemán, aprender simultáneamente lenguas estrechamente relacionadas no es lo ideal. Los expertos aconsejan optar por lenguas con características diferentes para evitar confusiones. Al seleccionar lenguas de familias diferentes, ayudarás a tu cerebro a organizar la información de forma más eficaz. Este enfoque también puede revelar aspectos únicos, como diferencias en el género gramatical o en las partes de la oración, que podrías pasar por alto al centrarte en una sola lengua. Si te apasionan dos idiomas similares, considera la posibilidad de dominar primero uno y retomar el otro más adelante.
Crea primero una base en un idioma
Si estás deseando explorar varios idiomas, sumergirte en dos o más a la vez puede parecer emocionante. Sin embargo, para lograr un éxito duradero, es aconsejable empezar con un idioma y añadir el segundo más adelante. Establecer una base sólida en el primer idioma te ayudará a manejar la nueva información con mayor eficacia. Intenta completar todos los cursos para principiantes en un idioma antes de embarcarte en tu próxima aventura lingüística.
Establecer objetivos claros y alcanzables
Cuando se trabaja con dos idiomas a la vez, es fundamental fijarse objetivos para mantener el rumbo y la motivación. Piensa qué quieres conseguir con cada idioma. ¿Uno es para trabajar y el otro para viajar? O tal vez uno te gusta cómo suena mientras que el otro te ayuda a relacionarte con tu comunidad. Sean cuales sean sus motivos, anota sus aspiraciones para los próximos seis meses o un año y ponlas en consonancia, asegurándote de que son realistas.
Recuerda que aprender dos idiomas ralentizará tu progreso si lo comparas con centrarte en uno solo. Para relacionarte con la comunidad, intenta mantener una conversación sencilla con un vecino sobre aficiones, comida o familia en un plazo de seis meses. Si está explorando el idioma de tus ancestros, intenta escribir una carta de dos párrafos a un pariente o antepasado. Estos pasos tangibles te guiarán hacia tus objetivos.
Convertir el aprendizaje de ambas lenguas en un hábito
Crear un hábito es fundamental para aprender idiomas con eficacia, sobre todo cuando se compaginan dos lenguas. Empieza por evaluar cuánto tiempo puedes dedicar al día. Lo ideal sería estudiar las dos lenguas todos los días; como mínimo, dedícate a una cada día. Reserva un tiempo específico en tu agenda y comprométete a dedicarlo; incluso 15 minutos al día pueden marcar la diferencia.
Por ejemplo, puedes estudiar italiano durante el desayuno y alemán después del trabajo. Considera la posibilidad de utilizar habitaciones diferentes para cada idioma, de modo que tu cerebro asocie un espacio concreto con cada lengua.
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